En esta prueba vamos a ver la nueva versión de montura G del clásico 80-400 VR de Nikon. Primero veremos lo que ha cambiado respecto al modelo anterior.
En la fórmula óptica del Nikkor AF-S 80-400/4.5-5.6 G ED VR se han añadido tres elementos más, se ha modificado el revestimiento del elemento frontal por el conocido N (nanocristales) y se ha reducido la distancia mínima de enfoque de 2,3 m a 1,75 m.
Como en todos los objetivos y zooms de montura G, se ha implementado la motorización de enfoque (SWM), dotando al sistema, además, de un limitador de distancia de enfoque desde los seis metros a infinito. El estabilizador VR ahora es él de segunda generación (VR II) y está dotado con las dos posiciones Normal y Active.
Con todo ello, el Nikkor 80-400 ahora pesa 200 g más, o sea que se va hasta los 1.570 g. Siendo una cifra apreciable, no es tan pesado como cabría imaginar si nos guiamos por el volumen que alcanza cuando lleva incorporado el parasol.
Con el Nikkor AF-S 80-400/4.5-5.6 G ED VR en las manos
El zoom está muy bien construido y acabado. La extensión de 80 a 400 mm se hace con facilidad y de un solo giro; en 90º recorremos todo el rango focal sin mucho esfuerzo ni atascos. El bloqueo de extensión en los 80 mm augura futuras holguras. En condición de casi nuevo el zoom no se extiende ni se contrae solo.
El frontal de goma, un parasol generoso, buena zapata de mandos operativos y junta tórica en la bayoneta denotan esmero en los acabados, si bien Nikon no nos habla de su estanqueidad a la lluvia por lo que mejor tener cuidado.
La zapata de trípode está bien calibrada para un cuerpo corto pero solo trae un orificio, Nikon entiende que el zoom no se usará mayoritariamente en cuerpos largos.
A continuación unas fotografías del zoom, las fichas de los detalles de diseño, operativos y de características técnicas.
Rendimiento en estudio del Nikkor AF-S 80-400/4.5-5.6 G ED VR
Resolución en estudio MTF 50%
Aberraciones cromáticas en el Nikkor AF-S 80-400/4.5-5.6 G ED VR
Valoración de aberraciones cromáticas laterales por focal y abertura.
Índices de referencia: ≥ 0,3% muy deficiente | de 0,2 a 0,3% deficiente | ≤ 0,2% correcto | ≤ 0,1% excelente
Enfoque en el Nikkor AF-S 80-400/4.5-5.6 G ED VR
Consistencia: correcto
Precisión: correcto
Micro-ajustes necesarios: 0
El sistema de enfoque funciona muy bien, muy rápido tanto en recorrido total como en rectificaciones siempre que trabajemos con el limitador de distancia de enfoque activado (6 m). Donde no cumple tan bien es en el ruido que produce: mejorable en enfoque único y muy mejorable en enfoque continuo. Los micro-ajustes que realiza en AF-C, en un barrido por ejemplo, producen un ruido y traqueteo interno apreciable.
Evaluación del Nikkor AF-S 80-400/4.5-5.6 G ED VR
Con este nuevo zoom Nikon ha renovado de forma sobresaliente el anterior Nikkor AF-D 80-400/4,5-5,6 ED.
Tanto por el rendimiento óptico general, el funcionamiento mecánico y del auto-foco así como las muestras de campo, este zoom ha superado con creces las expectativas que inicialmente tenía puestas en él. El zoom es de aquellos que pese a no tener una abertura máxima grande se puede trabajar con él desde la máxima y en todo el rango focal.
Digo expectativas porque cuando uno se enfrenta a un zoom de estas características la predisposición inicial que se tiene es un poco escéptica, hasta temerosa de lo que pueda salir. En este caso, pasado el primer tramo de pruebas de rendimiento óptico, vistos todos los resultados y el comportamiento del AF en caballete, la forma de salir al mundo real cambia de forma radical.
Auto-foco rápido y consistente, siempre limitando a 6 m la de distancia mínima de enfoque a infinito, con una precisión muy buena, un estabilizador sobresaliente y una nitidez de notable alto, hacen que cuando sales a la calle vayas con total confianza; las muestras realizadas así lo reflejaron.
Muy corregido de aberración esférica y con niveles de aberraciones cromáticas bajos, al zoom le entran y reproduce bien tanto motivos en el centro como en las esquinas «sin sonrojarse» en estas zonas.
Como moraleja y/o reflexión de concepto de este y otros zooms de rango focal similar, debo de repetir lo comentado en la página de Construcción: si el zoom acabas usándolo el 90% de fotos en los 400 mm y si además quieres más tele y lo montas, por ejemplo, en una Nikon D7100 al final, cuando el bolsillo te lo permita, seguramente acabas yendo a por un AF-S Nikkor 300/2.8 G ED VR II con o sin tele-convertidor.
A favor
- Nitidez notable en todo el encuadre desde plena abertura y en todo el rango focal, teniendo siempre en cuenta la lógica bajada según se va estirando la focal. En todo caso la bajada es muy progresiva, manteniendo un nivel de nitidez correcto hasta los 400 mm (visto en 24 mp y formato FX)
- Sistema auto-foco, construcción, agrado de uso y acabados excelentes.
Mejorable
- Gestión del AF en modo continuo. Las pequeñas correcciones generan un ruido/traqueteo excesivo.
Podéis ver el análisis completo del Nikkor AF-S 80-400/4.5-5.6 G ED VR en Digital Camara Lens.
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