Nos levantamos y nos acostamos viendo vídeos, comemos con vídeos y vamos al baño distrayéndonos con vídeos. Al fin y al cabo, es lo que más vemos en nuestras pantallas.
Si te gustan los vídeos, pero ademas te gustaría aprender a grabarlos, este post es para ti. Te damos algunos consejos para que te lances a darle al rec:
1. Todo lleva su tiempo
“La vida es eso que pasa mientras tú estás grabando y editando”. Grabar no es como hacer fotos, aunque es igual de valioso, lleva más tiempo tanto para grabar como para editar. No tengas prisa y tómate el tiempo que necesites.
2. Conoce tu cámara
Debería “sonarte” de lo que es capaz. Lo importante es que tengas clara la idea en tu cabeza. Pero por ejemplo, si quieres grabar con poca luz o hacer cámaras lentas, son dos situaciones que no todas las cámaras resuelven igual.
¿Te suenan las palabras: manual de instrucciones? Pues eso, no dudes en recurrir a él si lo necesitas.
3. Ten en cuenta la luz
¿Eres de madrugar o de trasnochar? Si usas luz continua la podrás controlar y moldear a tu gusto, pero la luz natural es muy caprichosa.
Pongamonos en situación: Madrugón. Las luces naturales más bonitas. Pero lo bueno dura poco. Después del amanecer, la luz cada vez es más dura e intensa.
También puedes usarla, evidentemente, pero a no ser que tengas el poder de invocar a las nubes para que la filtren, de forma directa te va a provocar muchas sombras.
Solución: Si hace mucho sol y no quieres una luz tan directa e intensa, la puedes filtrar, grabar en la sombra o usarla a contraluz.
Si no te gusta madrugar, siempre puedes esperar al atardecer.
4. Lo arreglamos en pospo… ¡NO!
No dejes para la edición lo que puedas arreglar grabando. De verdad, no te compliques la vida. Si en el fondo de tu encuadre hay algo que no te gusta y lo puedes quitar manualmente ¡hazlo! Quitarlo en edición te llevará horas y hará que te vuelvas loco. ¡Te hemos avisado!
5. Buen sonido
Tu vídeo puede verse fetén, pero como no se oiga bien nadie lo va a ver. Graba en un entorno tranquilo, usa micrófono si puedes y evita horas punta de entrada y salida a colegios o trabajos. Muchas veces pasa que estás listo, le das al botón de grabar y empiezan a taladrar algo, por ejemplo. Y te advertimos, arreglar el sonido en edición es un quebradero de cabeza, es mejor esperar si puedes.
Extra Tip: Cuando compres tu cámara ten en cuenta que tenga entrada de micro, si no, puedes grabar con una grabadora externa.
¿Quieres saber más sobre micros? Échale un vistazo a nuestro artículo.
6. Almacenamiento y potencia
Si no quieres que tu ordenador colapse o explote necesitas un ordenador potente para poder editar. Ten en cuenta que los softwares de edición necesitan un rendimiento muy elevado y los archivos de vídeo pesan mucho más de lo que piensas. Así que ten presente que también vas a necesitar discos duros de gran capacidad para almacenar todo lo que grabes.
7. ¿Vídeo horizontal o vertical?
¿Qué más da? Ambas opciones son creativas, ¡sácales el máximo partido!
Aunque hay cámaras que ya graban en ambas orientaciones, si quieres tener un vídeo vertical, gira la cámara cuando estés grabando y rota después en postproducción.
Si usas trípodes también puedes girar el vídeo en ambas direcciones.
8. Encuadrar vs enfocar
Enfocar es girar el anillo del objetivo para que la imagen se vea nítida y encuadrar es decidir qué es lo que va a salir en el encuadre de tu plano.
Bien, partiendo de esa base tan sencilla: Deja de decir “enfoca ahí” o “enfoca X” cuando en verdad lo que tienes que decir es “encuadra ahí” o “ encuadra X”.
Cuando la gente dice eso, en verdad lo que se hace es encuadrar la cámara.
9. Resoluciones
La resolución es la calidad a la que vas a grabar tu vídeo, pero no significa que si grabas a la máxima resolución tu vídeo será mejor. La resolución puede ayudar, pero no es tu salvación.
Lo importante es como grabas tu. La luz y lo que pasa en ese plano.
Las resoluciones son desde HD, FullHD y hasta 4K o más. Lo más usado ahora mismo es FullHD y 4K. Puedes grabar en una resolución concreta y editar o reproducir en otra. Todo depende de dónde y cómo se vaya a ver el vídeo. También puedes grabar en 4K y hacer recortes si no tienes dos cámaras. El FullHD se usa mucho para directos y el HD para reproducir en móviles. A cuanta más resolución grabes, más potente tiene que ser tu ordenador para que no explote y más disco duro vas a necesitar.
10. Fotogramas por segundo
Los fotogramas por segundo son las fotos que tiene tu vídeo por cada segundo grabado, a cuantos más fotogramas grabes más nitidez y fluidez.
Un vídeo natural para nuestro cerebro se graba entre 24 y 25 fotogramas por segundo. Para ordenador o móviles se acostumbra a grabar a 30 fotogramas y para cámaras lentas de 60 fotogramas hacia delante. Se puede grabar a 120, 240 o hasta lo que te permita la cámara. A cuántos más fotogramas por segundo grabes, mejor será la cámara lenta. La verdad que un plano a cámara lenta, gana mucho, es más épico. ¿Será por qué siempre fantaseamos con ralentizar o detener el tiempo? Quién sabe.
11. Ajustes de exposición
En vídeo, lo recomendable es que la velocidad de obturación, esté al doble de los fotogramas a los que grabes. El balance de blancos para equilibrar el color, el ISO por si te falta luz (aunque no lo subas mucho porque sino te aparecerá ruido digital difícil de quitar) y el diafragma para ganar más luz y más o menos profundidad de campo. Estos conceptos son de un nivel más alto, si quieres que hagamos otro post más específico, pídelo en los comentarios.
12. Enfoque manual o automático
Ambas opciones van bien. Usa enfoque manual si tienes la suficiente práctica y el entorno es tranquilo, usa automático si hay objetos que se muevan rápidamente en tu plano.
Todo lo que te contamos está muy bien, pero si no practicas, no vas a aprender. Graba y edita hasta que te salgan frames por las orejas.
